Orad sin cesar.
Luego de una visita de su discípulo Timoteo a Tesalónica, y del buen reporte que este le llevó a Pablo. El apóstol se sintió motivado a escribirle a la iglesia de que estaba en ese lugar.
En esta carta Pablo anima a los creyentes a seguir firmes en la fe a pesar de los obstáculos que se presenten. También se defiende de las críticas que los judíos habían hecho sobre él y motiva a la iglesia a vivir en santidad ante el Señor.
En este capítulo 5 el apóstol contesta algunas preguntas que tenían los creyentes sobre los hermanos que habían muerto. Y luego pasa a hacerles algunas exhortaciones sobre la vida del seguidor de Cristo.
Una de las cosas que Pablo les dice es que oren sin cesar vemos el verbo orar de forma imperativa, ya que era un mandato que ellos no podían pasar por alto.
Este es un texto muy mencionado en el ámbito cristiano. De cual las Iglesias hablan mucho. Pero también puede ser malentendido.
El apóstol no nos dice acá que lo único que debemos hacer es orar y no prestarle atención a las responsabilidades que tenemos en el día a día, sino más bien nos habla de mantener comunicación constante con Dios en medio de nuestra cotidianidad.
Sin importar lo que tengamos que realizar la oración debe tener primacía en la vida del cristiano, porque a través de ella Dios sacia nuestro corazón.
Pablo nos habla de algo que no es opcional para el creyente. La oración debe ser una prioridad en la vida del cristiano.
Nuestro más grande modelo de una vida constante de oración es Jesús. En la palabra vemos que el Señor se apartaba frecuentemente a hablar con el Padre.
Jesús también espera que sus discípulos oren, por eso les enseñó en una ocasión cómo deben hacerlo.
En toda la Biblia vemos a los hombres de Dios buscándolo en oración. Uno de los ejemplos es Daniel a quien sus enemigos quisieron impedir que mantuviera una vida en comunión con su Dios, pero no lo pudieron lograr. Por lo contrario, este hombre oraba tres veces al día.
Ojalá te animes a buscar a tu Señor en oración cada día de tu vida!
“No olvides orar hoy porque Dios no olvidó despertarte esta mañana”, Oswald Chsmbers
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