Salmos 127:1
Si el Señor no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican; si el Señor no guarda la ciudad, en vano vela la guardia.
La familia es la célula de la sociedad, es decir la parte fundamental. Según vayan las familias, así irá la sociedad.
La familia inicia con la unión de un hombre y una mujer para ser una sola carne, el matrimonio. Mientras más fuerte sea el lazo de la pareja y su relación con Dios, más sólida será la familia que estos construyan.
Hoy día es fácil ver el deterioro de la sociedad actual debido a que lo que practicamos, en su mayoría, es completamente opuesto al modelo bíblico.
El apóstol Pablo nos enseña en el capítulo 3 de la epístola a los colosenses en los versículos del 18 al 21, la función de cada miembro de la familia conforme al diseño de Dios.
Lo primero que podemos observar es la sumisión de la esposa al liderazgo de su esposo. Ambos son iguales en dignidad pero diferentes en las funciones. Ella está llamada a ser la ayuda idónea de su marido.
Mientras al esposo se le exhorta a amar a su esposa. Su liderazgo es sobre la base de su servicio y su amor. También se le dice que no sea tosco con ella.
En relación a los hijos se les llama a obedecer a sus padres, porque eso es agradable a Dios. Y además es el primer mandamiento con promesa. Es importante imitar el ejemplo de Jesús, quien fue obediente al Padre en todo.
A los padres el apóstol les manda a no provocar a ira a sus hijos para que estos no se desanimen, sino más bien deben motivar y corregir a los hijos con amor, mostrándole la gracia y el perdón de Dios.
La razón principal de los males que afectan a la sociedad hoy día es debido a la falta de familias que modelan el diseño de Dios. Debemos reflexionar y dar un giro a nuestra vida para empezar a caminar de acuerdo al diseño bíblico.
Oración:
Dios, te damos gracias por Tu amor y Tu cuidado. Te pedimos sabiduría para poder formar familias conforme a Tu voluntad y poder darte gloria en todo lo que hacemos.
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