Jesús iba caminando por Jericó y había un
hombre rico que quería verle, este al ser de baja estatura tuvo que ir a un
espacio donde pudiera lograr verlo. Jesús en el lugar en que estaba Zaqueo lo
mira y le dice: Ven me es necesario entrar a tu casa hoy. Este fue hasta Jesús y
le recibió gozoso. Muchos comenzaron a murmurar. Zaqueo prometió hacer actos de
misericordia y Jesús le contestó: hoy ha venido la salvación a esta casa por
cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y
a salvar lo que se había perdido.
Zaqueo no solo era rico por tener bienes
materiales, tenia vida y salud y libertad, su baja estatura no solo era física,
sino también emocional por cuanto las demás personas del pueblo le despreciaban
y para quienes trabajaban no le miraban como alguien de valor (una situación
difícil) muchos nos hemos visto asi que ni a derecha ni a izquierda nos llenan.
Ir a un espacio donde podía ver a Jesús es retirarte del bullicio del entorno y
tomar un tiempo a solas para ponerte a cuentas con Jesús. Sin duda alguna él te
mirará tal como miró a Zaqueo y créeme, en verdad el gozo vendrá a ti. Muchos
criticarán y pondrán en duda que tú de corazón y en verdad estés buscando al Señor,
pero eso no es relevante. Haz actos de misericordia y verás cómo cambian las
cosas. Y en honor a la verdad se dirá de ti que la salvación ha venido a tu casa.
Dios vino a buscar lo que se había perdido,
vino a buscarnos a ti y a mi. Hagamos nuestra parte y veremos en nosotros la
salvación. El mejor sentimiento que podemos tener.
Lucas 19:1-10 - RVR1960
19:1 Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba
pasando por la ciudad. Y sucedió que un
varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, procuraba ver
quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de
estatura. Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque
había de pasar por allí. Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia
arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es
necesario que pose yo en tu casa. Entonces él descendió aprisa, y le recibió
gozoso. Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con
un hombre pecador. Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí,
Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a
alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación
a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. Porque el Hijo del
Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.
Escrito por: Michael A. Ascencio.-
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